Crisis del Antiguo Régimen y Estallido Revolucionario
La crisis fiscal fue el detonante principal de la revolución. Francia estaba en bancarrota debido a los enormes gastos en guerras como la Guerra de los Siete Años y el apoyo a la independencia estadounidense. La monarquía borbónica no podía recaudar suficientes impuestos para cubrir sus gastos, creando un círculo vicioso.
El sistema tributario injusto agravó la situación social. Mientras la nobleza y el clero no pagaban impuestos, el Tercer Estado (campesinos, burgueses y artesanos) cargaba con todo el peso fiscal. Esto aumentó la pobreza rural y generó un profundo resentimiento hacia los estamentos privilegiados.
La convocatoria a los Estados Generales en 1789 marcó un punto de no retorno. Esta asamblea, compuesta por el clero, la nobleza y el Tercer Estado, no se había reunido en más de un siglo. Sin embargo, las tensiones sobre el sistema de votación llevaron al Tercer Estado a formar la Asamblea Nacional, rompiendo con la estructura tradicional.
¡Dato clave! La crisis alimentaria de 1787-88, causada por sequías, hizo que el precio del pan se disparara, aumentando el descontento popular justo antes de la revolución.