Inmunidad Innata: Tu Primera Línea de Defensa
La inmunidad innata es tu sistema de seguridad 24/7, presente desde que naciste. Actúa súper rápido 0−96horas pero no es específica: ataca a todos los invasores por igual y no genera memoria.
Tus mecanismos externos son barreras épicas: la piel con su descamación constante y pH ácido del sudor, el moco que atrapa microbios, las lágrimas y saliva con lisozima enzimacome−bacterias, y tu microbiota autóctona que compite con los malos.
Cuando los invasores logran entrar, actúan tus mecanismos internos: fagocitos como neutrófilos (primeros en llegar, mueren luchando) y macrófagos (limpiadores y coordinadores), más las células NK que destruyen células infectadas sin piedad.
El sistema del complemento es una cascada de proteínas que perfora microbios, los marca para fagocitosis (opsonización) o atrae más defensores. Las citocinas son mensajeros químicos: interleucinas activan células, interferones alertan sobre virus, quimiocinas guían el movimiento.
¡Clave para entender! Los PAMPs son moléculas únicas de microbios que tus receptores PRR reconocen para activar la alarma inmune.